Rezar
¿Por qué rezar a
San Miguel Arcángel?
San Miguel es, junto a San Gabriel y San Rafael, uno de los principales arcángeles del antiguo y nuevo testamento. En hebreo, su nombre significa "¿Quién Como Dios?". La intercesión de San Miguel Arcángel es poderosa, pues él es el jefe del ejército del Señor contra Satanás, y nos da la fuerza y el coraje en nuestra lucha contra el mal. No dudemos en rezarle como la iglesia nos invita a hacerlo.
¿Por qué rezar a San Miguel Arcángel?
El extraordinario poder de San Miguel
En el libro de Apocalipsis, San Juan tiene una visión del arcángel San Miguel matando al dragón durante una gran batalla celestial: “Entonces se libró una batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles combatieron contra el dragón, y este contraatacó con sus ángeles, pero fueron vencidos y expulsados del cielo" (Apocalipsis 12:7-8). San Miguel es pues “el jefe del ejército del Señor” (Josué 5:14), el cual, “fuerte en la lucha, ganó la victoria” contra Satanás y los demonios (Breviario romano). De este modo, su fuerza, méritos y amor por Dios superan los de los demás ángeles.
De la misma manera que las oraciones de los santos nos salvan, la intercesión de San Miguel es poderosísima. Por eso San Alfonso María de Ligorio nos invita a rezarle: “"Si es conveniente en todo momento rezar a San Miguel, ¿no es necesario en este momento recurrir a su poderosa intercesión, pedir a este glorioso conquistador de Lucifer, a este portador de la bandera de Cristo, que defienda a la Iglesia, y a nosotros mismos, en la terrible y atroz lucha de los enemigos de Dios contra la religión y nuestras almas?”. Por consiguiente, podemos pedir la ayuda de San Miguel para la Iglesia y las causas públicas, así como para nuestras necesidades particulares.
San Miguel, guardián de la iglesia y santo patrono de la Infantería y del Ejército
En el Antiguo Testamento, se describe a San Miguel como “el ángel de Dios, que marchaba delante de Israel” (Éxodo 14:19). Él es enviado por Dios para que “proteja [al pueblo] en el camino y [le] conduzca hasta el lugar que [le] he preparado” (Éxodo 23:20). Esta misión atribuida por Dios al arcángel lo convierte, por un lado, en protector del pueblo de Dios, es decir, de la Iglesia, y por otro, en el defensor de las naciones.
San Miguel es el patrono de diversos oficios, del ejército, la infantería y la policía. De hecho, los paracaidistas militares franceses y de otros países buscan también su protección.
San Miguel, defensor de nuestras almas
Además, la Iglesia Católica reconoce a San Miguel como el ángel a quien Dios ha confiado la misión de llevar las almas al paraíso: “El arcángel Miguel vino con multitud de ángeles. Dios le confió las almas de los santos para que los conduzca al gozo del paraíso” (Breviario Romano). Por tanto, podemos, con todos los creyentes, dirigir esta invocación a San Miguel: “San Miguel arcángel, defiéndenos en la lucha, para que no perezcamos en el terrible juicio” (Misal Romano).
De este modo, San Miguel puede ayudarnos de manera especial en el momento de nuestra muerte, pero también en nuestra lucha contra el enemigo a lo largo de nuestra vida, razón por la cual nuestras oraciones pidiendo la liberación y la protección están dirigidas a él. De hecho, Dios mismo da a sus ángeles la misión de guardarnos en nuestros caminos. “Ellos te llevarán en sus manos para que no tropieces contra ninguna piedra” (Salmos 91:12).
¿Cuándo y cómo rezar a San Miguel?
Oración a San Miguel para todos los días
Durante casi un siglo, se rezaba una oración a San Miguel Arcángel al final de cada misa. En 1886, el papa León XIII lo estableció de este modo, y más tarde, la reforma litúrgica del Concilio Vaticano II suprimió esta práctica. Sin embargo, el santo padre Juan Pablo II recomendó encarecidamente “la práctica diaria de la oración al Arcángel Miguel, establecida por León XIII”.
“San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha. Sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Que Dios manifieste sobre él su poder, es nuestra humilde súplica. Y tú, oh, Príncipe de la Milicia Celestial, con el poder que Dios te ha conferido, arroja al infierno a Satanás, y a los demás espíritus malignos que vagan por el mundo para la perdición de las almas. Amén.”
Además, podemos optar por consagrarnos personalmente o en familia a San Miguel, y renovar esta consagración cada día.
La visión del infierno de León XIII
Pero ¿Qué vio el papa León XIII que lo inspiró a hacer esta oración, y a que quisiera que se rezara en cada celebración eucarística? Su visión ha quedado plasmada en varias obras, en particular en “La conjuration anti chrétienne” (La conjuración anticristiana en español) de Mons. Henri Delassus. Allí, el Papa León XIII describió un intercambio entre dos voces, la de Dios y la de Satanás, el cual estaba convencido de que en poco tiempo podría destruir la Iglesia. Luego tuvo una "terrible visión del infierno" y, al final, vio a San Miguel Arcángel interviniendo, luego que se multiplicaran las oraciones que los fieles le dirigían.
Mediante la amplia difusión de su oración a San Miguel, y la institución de su rezo al final de cada misa, el Papa León XIII quiso comunicar a todos los creyentes la urgencia de orar con fervor por la conversión de las almas y la victoria de ejército del Señor contra el de Satanás, el cual está tan activo en todo el mundo. ¿Qué esperamos para pedir la protección e intercesión de San Miguel?
Reza en la fiesta de San Miguel Arcángel
La fiesta a San Miguel se celebra varias veces al año. De hecho, la fiesta principal es la de los santos arcángeles, que se celebra el 29 de septiembre. Para esta ocasión, podemos rezar varias de sus oraciones, por ejemplo, la oración de consagración.
Por otro lado, debemos saber que San Miguel también se celebra el 8 de mayo, día de su aparición en el monte Gargano (en esta ocasión se canta un himno especial).
¿En qué puede ayudarnos San Miguel Arcángel?
Podemos pedir la ayuda de San Miguel para la Iglesia y las causas públicas, así como para nuestras necesidades particulares
San Miguel puede ayudarnos de manera especial en el momento de nuestra muerte, es quien Dios ha confiado la misión de llevar las almas al paraíso, pero también en nuestra lucha contra el enemigo a lo largo de nuestra vida, razón por la cual que nuestras oraciones de petición sean de liberación y de su protección contra la maldad del maligno, de modo que no entremos en tentación y seamos libres del pecado.
Pedir la intercesión de San Miguel Arcángel nos llena de valor y fuerza en la lucha contra el mal. Debemos orar con fervor por la conversión de las almas, que nos defienda de todas las asechanzas del demonio, y por los que están más alejados de Dios.
Otras oraciones a San Miguel arcángel
Devoción a San Miguel
San Miguel es el objeto de una fuerte devoción ya que es el santo patrón de muchos países, especialmente Francia. La fuerza y la belleza de esta devoción francesa es ilustrada por el monte Saint-Michel. Por cierto, existen actos de consagración a San Miguel para confiar su familia o un lugar a este poderoso protector. Otra manera de honrar este santo y de pedir su intercesión es recitar el rosario a San Miguel. Puede también ser el objeto de novenas. (oraciones de 9 días).